El gobierno de César Horacio Duarte Jáquez estructuró un andamiaje financiero para amigos y familiares, así como un grupo cercano de amigos y empresarios que se beneficiaran con las adquisiciones de la administración pública de manera directa, sin que mediaran para ello las adecuadas licitaciones.

Familiares, amigos y empresarios afines al gobierno estatal 2010-2016 fueron parte de adquisiciones de diversos servicios, para lo cual se crearon empresas de manera rápida para proveer de servicios a la administración estatal, sin que hubiera competencia alguna por parte de otras empresas que no fueran las elegidas por el gobernador.

Los jefes de departamento fueron nombrados por el entonces gobernador para operar de manera libre los desvíos de recursos.

Los procedimientos de adquisición se dieron de manera directa, familiares del exgobernador como Antonio García Tarín, hicieron negocios personales con fondos del erario público, como un restaurante bar ubicado entre Mirador y Antonio Ortiz Mena.

Las relaciones familiares permitían establecer acuerdos directos con el exgobernador y con los directores de área, para los procesos de licitación y adquisición en los que las empresas proveedoras ganarían los fallos.

La coordinación de los directores de adquisición estuvo siempre dirigida por los directores generales de administración siendo estos durante el periodo 2011-2013, Carlos Hermosillo Arteaga y del 2013 al 2016 Gerardo Villegas, en ambos casos existe cercanía familiar de muchos años atrás con César Duarte.

Las funciones de operación se desarrollaban de manera directa bajo la dirección de César Duarte, además se adquirieron servicios irreales y con sobreprecio, diversas áreas generaron recursos económicos que fueron procesados por diversos operadores, tanto en la estructura del gobierno como operadores externos y en otros casos y sin realizar procesos apegados a la ley.

Se procedió de manera directa a la adjudicación por pago de obra pública. El proceso se apegaba a la ley pero en las etapas de adjudicación y licitación, al final la dirección de adquisición determinaban en el fallo a los ganadores que previamente había instruido el gobernador César Duarte, con base en ello se definía la entrega de los recursos públicos.

Los mecanismos para la recuperación del dinero se realizaban acorde a la condición específica de cada caso, por ejemplo algunas veces el operador o intermediario cobraba con sobreprecio y entregaba un porcentaje del pago al exgobernador o sus colaboradores cercanos, en el caso de empresas creadas para generar facturación sin servicios o empresas fantasma, éstas entregaban dinero de manera directa al director general de administración y su equipo más cercano.



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